Se han presentado los datos del informe realizado por el Observatorio vasco del Tercer Sector Social
Coincidiendo con el Día del Tercer Sector Social de Euskadi, el lehendakari Iñigo Urkullu ha participado en la Mesa del Diálogo Civil, en la que se ha tratado la situación de las organizaciones sociales durante la crisis del Covid-19.
Según el estudio realizado en el mes de abril por el Observatorio vasco del Tercer Sector Social, un 83,2% de las organizaciones sociales que trabajan en la CAV se ha enfrentado a una modificación o reorientación de servicios o actividades por la crisis sanitaria y un 81% de organizaciones ha visto algunas de sus actividades canceladas o suspendidas. Además, casi la mitad (46%) de las organizaciones sociales ha tenido que cerrar servicios de atención directa, pero un 38% de las entidades han incorporado nuevas actividades para dar respuesta a las necesidades emergentes. Ocho de cada diez entidades han llevado a cabo una conversión al formato on line o al acompañamiento telefónico.
Los datos de este informe se han dado a conocer en la reunión de la Mesa de Diálogo Social, en la que ha participado el lehendakari Iñigo Urkullu con motivo del Día del Tercer Sector Social en Euskadi. En dicha reunión también han estado presentes la consejera de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco, Beatriz Artolazabal, junto con una amplia representación de su equipo y el presidente de Sareen Sarea, Pablo González, así como una veintena representantes del Tercer Sector Social.
El lehendakari ha querido destacar “la capacidad de adaptación» del Tercer Sector Social durante la crisis sanitaria. La consejera Beatriz artolazabal ha señalado que, “en esta difícil época de pandemia, virus y confinamiento, queremos propiciar otra epidemia imparable: la de la solidaridad y el reconocimiento social también a quienes están luchando a brazo partido contra la exclusión y en favor de las personas más vulnerables”.
Finalmente, el presidente de la Mesa de Diálogo Civil y de Sareen Sarea, Pablo González, ha señalado que “desde las organizaciones del tercer sector social, subrayamos la necesidad de articular una respuesta solidaria que impulse y favorezca el mantenimiento de los vínculos sociales. Frente al aislamiento y al individualismo, la solidaridad debe guiar la búsqueda del bien común. Aunque todavía seguimos en un contexto de agitación e incertidumbre, hay esperanza. El tercer sector social tiene sobrada experiencia en trabajar en entornos desafiantes”.